En México hay ocho millones de diabéticos y de acuerdo con las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) la cifra de estos enfermos en el mundo aumentará en 2025 a 350 millones y el mayor impacto lo tendrá Asia.
El avance en el tratamiento de pacientes con diabetes ha logrado evolucionar a tal grado que hoy muchas de las personas que padecen esta enfermedad pueden hacer una vida prácticamente normal. La diabetes mellitus es una enfermedad crónica provocada por la incapacidad del organismo para generar insulina o utilizarla adecuadamente. La insulina es una hormona producida por el páncreas, cuya función es regular el uso de glucosa (azúcar) en el organismo; por lo tanto, es esencial en el proceso metabólico, al trasformar el azúcar, el almidón y otros alimentos en la energía que necesitamos para nuestra vida diaria.
La diabetes mellitus es la tercera causa de mortalidad en el país, según informo el Dr. Mario Cervera Casanova, subdirector médico de la Clínica de Medicina Familiar Mérida del ISSSTE, quien agregó que esta enfermedad ha ocasionado en años anteriores más de 50 mil muertes en México. Asimismo refirió que del total de diabéticos, la mitad también padece hipertensión arterial, lo cual se traduce en mayor riesgo de embolia y de infarto; 50 % sufre retinopatía, una enfermedad de los ojos que ocasiona ceguera, y todos tienen 14 veces más riesgo de amputación de alguna extremidad.
Destacó que en el ISSSTE lleva a cabo tareas de detección, prevención y manejo de la diabetes, además de informar y promover acciones específicas en los clubes de pacientes para el adecuado manejo de su padecimiento.
Comentó que periódicamente se desarrollan pláticas que abarcan temas relevantes para los pacientes, como son la nutrición, la importancia de la higiene bucal, las complicaciones de la diabetes, el cuidado de los pies y la prevención de accidentes.
Comento que en el interior del Estado están establecidos clubes para pacientes diabéticos con el propósito de sensibilizarlos. Se pretende que las 15 Unidades de Medicina Familiar se sumen a este esfuerzo de prevención y tratamiento de esta enfermedad crónico degenerativa.
Para mantener el azúcar bajo control es necesario seguir siete puntos fundamentales: “conocer sobre la enfermedad, seguir un plan alimenticio saludable, realizar actividad física, tomar medicamentos hipoglucemiantes preescritos por el médico, monitorear constantemente los niveles de glucosa, atender complicaciones y acudir frecuentemente al médico”, concluyó.