Desde hace 23 años, el Dr. Jorge Espinosa Suñer otorga consultas médicas sin cobrar un solo centavo y además proporciona el médicamento en forma gratuita en su consultorio “San Juan Bosco” de la colonia Miraflores.
El facultativo, que fue profesor de Medicina de la UNAM, informó que se sostiene sólo de su pensión, ya que Dios le envía y le da lo que necesita para vivir; su único deseo es poder ayudar a la gente que lo necesita.
Los vecinos lo consideran un “ángel de bata blanca” que no busca reflectores, sino sólo seguir ayudando a quienes lo requieren.
“Mientras más pobres, más gusto me da ayudarlos”, afirmó con una sonrisa. “Hubo alguien que vivió hace 2 ó 13 años y ayudaba sin afán de presumir. Yo trato siempre de ser lo más humilde posible”.
Y precisamente del Creador viene su motivación para realizar esta labor callada, permanente y sin ganar dinero. “El amor es dar sin esperar recibir”, añade.
El Dr. Espinosa dice que “todos le pedimos a Dios, al gobierno, a nuestros vecinos, amigos y familiares. Pero casi nadie quiere dar” y añade que si todos diéramos un poco de lo que Dios nos dio, viviríamos mejor y en concordia.
Entre sus benefactores reconoce al diputado Francisco Torres Rivas, quien le ha apoyado en diversas ocasiones con despensas y cobertores para la gente, y ahora se suma con medicamentos. Conoció al diputado priísta cuando éste hacía campaña hace casi un año.
—“Pasaba Panchito por aquí, caminando y yo salí, lo llamé para pedirle su apoyo, desde entonces me ha ayudado. Ahora espero también que ayude a los jóvenes de la colonia”, dijo.
En su pared tiene colgada una lista con los nombres de sus benefactores, en la que figuran empresas, laboratorios médicos y personas de buena fe que le hacen llegar donativos en especie.
“Toda ayuda es bienvenida”, expresa.
Relató el caso de una pareja de ancianitos que en una ocasión le llevaron “dos pastillitas” que les sobraron, “Lo que importa son las ganas de ayudar”, señaló.
El médico, quien es un personaje en la colonia, fue entrevistado durante una entrega de despensas a los vecinos por parte del diputado Torres Rivas, por lo en su mensaje “Panchito” Torres dijo que le llenó de gusto conocer el trabajo que el doctor Espinosa realiza y por ello hice el compromiso de apoyarlo en lo que necesite.
Resaltó que el doctor Espinosa Suñer es una persona que da el ejemplo de apoyo a la comunidad y hay que ayudar al que ayuda.
Aunque el médico dice que cuenta con lo necesario, acepta que tiene un problema y “que no voy a poder resolver”: el espacio. Es limitado el pequeño consultorio y su área de espera para atender a toda la gente que llega.
Durante la entrevista, muestra los medicamentos que regala a sus pacientes: algunas ampolletas cuyo precio comercial es de 150 pesos y pastillas que cuestan más de 800 pesos.
El dispensario médico “San Juan Bosco” se encuentra en la calle 19 por 20 y 22, en el predio número 201-F de la colonia Miraflores. Si usted desea ayudar, puede visitarlo en el horario de atención: de 8 a.m. a 2 p.m. y de 4 a 7 p.m. El teléfono es 929-39-87 y celular 9991 83-32-94.
El doctor Espinosa Suñer es médico graduado en la Universidad Nacional Autónoma de México. Atiende a 20 personas en promedio al día y no tiene empleados. Con él trabajan su esposa como enfermera y asistente, su hijo como laboratorista y su cuñada es dentista.
Ellos ofrecen análisis clínicos y consultorio dental a precios módicos, más barato incluso que en otros consultorios de bajo precio.
Señala que le enoja mucho que muera alguien por falta de atención, por no tener dinero para atenderse. “El rico puede ir a donde quiera, el pobre no. Y muchas veces lo tratan con la punta del pie”, se queja. “Me enoja mucho que a los pacientes pobres los manden a la calle a esperar que se mueran”.
Por eso, dice, seguirá con su labor de ayudar a la gente pobre hasta donde Dios se lo permita, con Su ayuda y la de los demás.