24 de julio de 2013

VECINO VIGILANTE YUCATAN.- Se recomienda evitar períodos prolongados antes los rayos solares


Debido a los intensos calores que se pronostican, se recomienda no exponerse por tiempo prolongado a los rayos solares, sobre todo a los niños, adultos mayores y personas con piel delicada, mantenerse bien hidratado y vigilar los alimentos que se consumen.
Javier E. Couoh Jiménez, director de la Unidad Municipal de Protección Civil de este puerto, dio a conocer que hay que tomar en cuenta las recomendaciones de no exponerse por periodos prolongados a los rayos del astro rey, para evitar problemas respiratorios y cardiovasculares.
Se recomienda beber mucho líquido, en este caso de preferencia agua, que reponen las pérdidas de líquido que el cuerpo experimenta con la sudoración, evitar salir a la calle en horas de intenso sol, retrasar paseos por el exterior y buscar sitios refrescados con aire acondicionado, emplear prendas de vestir de algodón, ligeras y con colores claros, evitar la exposición prolongada al sol y utilizar protección solar, sobre todo en cabeza, cuello y brazos, comer frutas y alimentos ligeros, refrescarse, siempre que se pueda, en piscinas, playas, lagos y zonas habilitadas para el baño.
Abrir y mantener ventilada la casa a última hora de la tarde o durante la noche, y evitar los momentos de más calor, debido a que las altas temperaturas, el exceso de sol y la falta del agua requerida por el cuerpo provocan golpes de calor y generan daños irreparables en el organismo.
Estar bien hidratadas las mujeres que deben incorporar como mínimo dos litros de agua diarios, y tres litros los hombres. Estas cantidades pueden variar según las condiciones del entorno como temperatura, humedad ambiental, nivel de esfuerzo físico y alimentación.
El l principal peligro es la deshidratación, no se detecta desde su inicio, sino que comienza a manifestar sus síntomas pasado un cierto tiempo cuando ya causó daños en órganos importantes como el hígado, riñón y piel.
Es importante tener en cuenta que niños y adultos mayores, que son las personas con más probabilidad de sufrir un golpe de calor, y los que pueden sentir los efectos más rápido. 
Además, cualquier persona que realice ejercicio físico intenso con altas temperaturas, consuma alcohol o determinados medicamentos, también deben tener especial cuidado para prevenirlo.
La prevención de un golpe de calor, aumentar el consumo de líquidos, tomar con frecuencia pequeñas cantidades y sin esperar a tener sed, evitar exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 17 horas).
El uso de cremas de pantalla solar con factor protección 15 o más y renovarlas ante el contacto con el agua o la transpiración, tener en cuenta que los productos autobronceantes no dañan, pero tampoco protegen, reducir el consumo de bebidas alcohólicas o muy azucaradas, evitar comidas muy abundantes, ingerir verduras y frutas, reducir la actividad física.
El uso de ropa ligera, holgada y de colores claros, sombrero, anteojos oscuros, en caso de sufrir un golpe de calor. Se recomienda que la persona afectada permanezca en un lugar fresco, a la sombra, recostada, pero siempre con los pies en alto, y en caso necesario acudir al médico.