Entre 2000 y 2011 se han contabilizado 19.447 siniestros fatales en los que han estado involucrados conductores de entre 16 y 18 años de edad por ir demasiado deprisa.
El exceso de velocidad es el principal factor de riesgo de un tercio de los accidentes fatales en los que han estado involucrados conductores adolescentes, según un nuevo informe de la Governors Highway Safety Association (GHSA). Esto supone cinco siniestros mortales diarios por este motivo en Estados Unidos.
En el informe “ Los accidentes mortales relacionados con el exceso de velocidad entre los conductores adolescentes y oportunidades para la reducción de los riesgos “, se afirma que el exceso de la velocidad es un factor de riesgo que ha crecido tres puntos en la última década en los accidentes en los que están involucrados conductores de entre 16 y 18 años de edad.
Así ha pasado del 30 por ciento en 2000 al 33 por ciento en 2011. Entre 2000 a 2011, se han contabilizado 19.447 accidentes mortales con participación de conductores adolescentes y que estaban relacionados con el exceso de velocidad.
Para los expertos en seguridad vial de Estados Unidos, el control de los límites de velocidad a los conductores adolescentes es vital, ya que ningún otro grupo de edad tiene un riesgo de accidente mayor.
El exceso de velocidad es más frecuente entre los varones adolescentes, por la noche, y en presencia de otros pasajeros adolescentes.
Cuando hay tres o más pasajeros adolescentes en un vehículo conducido por un varón de 16 años de edad, casi la mitad de sus accidentes mortales están relacionados con el exceso de velocidad.
Licencia de conducir supervisada
Además de analizar el problema de los adolescentes y por exceso de velocidad, el informe también se centra en las posibles soluciones como la Licencia de conducir supervisada (GDL), que ha mejorado la seguridad del conductor adolescente y que fue promulgada por primera vez en los Estados Unidos a mediados de los años noventa.
El informe pone de relieve la importancia de contar con leyes de GDL, que imponen restricciones nocturnas y de pasajeros a los conductores adolescentes, ya que limita su exposición a condiciones de exceso de velocidad.
Además, los autores del informe aconsejan a los estados y jurisdicciones locales instalar cámaras de velocidad automáticas y a mejorar la participación de los padres en la formación del comportamiento de conducción de sus hijos adolescentes.
Así, se recomienda a los padres estas pautas a seguir:
Tener conversaciones serias acerca de la importancia de observar las leyes de tránsito, demostrar con el ejemplo, y establecer normas familiares y las consecuencias por violar las leyes.
Evitar que los adolescentes puedan conducir solo un vehículo al menos durante el primer año de licencia.
Que la seguridad sea la principal consideración al seleccionar un coche.
Tener en cuenta las muchas opciones para dispositivos de control de velocidad en los vehículos tanto en el mercado secundario y cada vez más como equipo original del vehículo.
Considerar la posibilidad de la participación en programas de seguros basados en incentivos que supervisar el uso, el frenado / aceleración y / o la velocidad.
Tomado de mundovial.net