De nuevo unos perros de raza pitbull están envueltos en un gran problema, así como su dueño, cuando dos canes escaparon de su jaula y atacaron a una niña de tres años, quien perdió la vida.
Las mordidas de los perros fueron letales para la menor, pese a que paramédicos acudieron a auxiliarla en su domicilio de la delegación Coyoacán, pero cuando revisaron a la niña ya no tenía signos vitales.
Los dos pitbull no eran propiedad de la familia de la víctima, sino del dueño a quien le rentaban la casa donde habitan, en la calle Museo al cruce con Diego Rivera, en la colonia San Pablo Tepetlalpa.
Los perros salieron al jardín porque trabajadores domésticos los liberaron, aunque en el sitio estaba la niña. También se cree que la casa se usaba como criadero de perros.
La Procuraduría General de Justicia capitalina ya investiga el caso, que será por el delito de homicidio. El dueño de los perros rinde su declaración ante el Ministerio Público y en breve determinarán su situación jurídica.
Versiones de prensa aseguran que la madre de la niña quiso matar a los perros, al intentar quitarles un arma de fuego a los oficiales que acudieron a su hogar, antes de que trasladaran a los animales dentro de jaulas.
Todo ocurrió al mediodía, cuando la Policía capitalina recibió la llamada de denuncia y que relataron que una niña tenía heridas de gravedad por las mordidas de unos perros.
Cuando los elementos policiacos llegaron al domicilio en la colonia San Pablo Tepetlalpa, el primero en recibirlos y abrirles la puerta fue el abuelo de la pequeña, quien dijo tener 69 años.
Al sitio llegaron -además de los paramédicos y policías capitalinos-, personal de la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) quienes se encargaron de meter en jaulas a los perros, tanto a los que se dice que agredieron a la niña, como a dos más.
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