Dialogar con la pareja, inculcar el respeto a uno mismo y a los demás, así como evitar las adicciones, en especial el alcoholismo, pueden ayudar a disminuir los índices de violencia contra la mujer.
En Yucatán, a últimas fechas, han ocurrido hechos lamentables, con costo de vidas humanas, principalmente de mujeres, los cuales llaman la atención y merecen una atención más esmerada, no sólo de las autoridades, sino de la sociedad en su conjunto.
Porque, evidentemente, los patrones de violencia se adquieren principalmente en el seno de los hogares y no hay peor actitud que tratar de evadir nuestra responsabilidad en este problema que tiende a crecer.
A continuación ofrecemos una serie de puntos de vista de personas sobre la violencia intrafamiliar.
Alejandra González Esquivel dice: “La comunicación entre las parejas es algo fundamental para evitar llegar a la violencia que puede ser de ambas partes pero que por lo regular es algo que no aplicamos en las relaciones y eso lleva a caer en conductas violentas más en el hombre y sobre todo cuando de por medio existe una adicción; las discusiones son situaciones que se presentan por algún desacuerdo, pero platicando las cosas podemos resolver las diferencias; ninguna de las partes debe de ser agredida porque es faltarnos al respeto; en caso de que las discusiones sean muy marcadas debemos de solicitar ayuda profesional y si la relación resulta ya insana, lo mejor es la separación para no causar mayores daños”.
Elsy Santiago opina: “Una buena educación desde la infancia es fundamental para que los hombres no le falten el respeto a las mujeres y nosotras no permitamos las agresiones de ellos; desde el hogar debemos de transmitir los valores y el ejemplo a nuestros hijos ya que de lo contrario esto se vuelven irrespetuosos hasta con su propia madre; definitivamente cuando hay vicios la violencia en el hogar es casi algo cotidiano y es por eso que debemos de evitar las adicciones sobre todo a las bebidas embriagantes,;las mujeres debemos de buscar ayuda apropiada cuando estemos sufriendo de violencia y en su caso denunciar los hechos para no llegar inclusive a poner en riesgo nuestra vida; el ejemplo que le demos a nuestros hijos en la casa es muy importante para evitar que sean violentos; las parejas podemos tener diferencias y padecer dificultades, pero si platicamos las cosas con toda seguridad que vamos a encontrar una adecuada solución; en caso necesario debemos de buscar apoyo psicológico y/o jurídico; no hay que tener pena, gracias a Dios en mi hogar no padecemos ese problema; mi esposo y yo preferimos platicar las cosas y resolverlas de común acuerdo; tenemos 2 hijas a las que estamos educando para ser buenas mujeres y no permitir que les falten el respeto”.
María del Rosario Sansores Poot y su esposo José Eduardo Valdez Arjona expresan: “Lamentablemente la violencia hacia la mujer se presenta más en hogares donde está presente el alcoholismo y/o la drogadicción, los padres debemos de ser ejemplo para que los hijos no recurran a la violencia, pero si éstos lo viven día con día en la casa, los más seguro es que al hacerse mayores lo vean como algo normal y se comporten violentos como sus padres; debemos, como seres humanos y más como pareja sentimental, respetarnos y darnos mutuo apoyo, debemos de tener más comunicación para evitar que diferencias pequeñas se hagan grandes; a los hijos debemos de tratarlos con el mismo amor y atención sin diferenciar su género, tanto mujeres como hombres debemos de hacernos cargo del hogar, no porque el esposo ayude en los quehaceres es menos varonil o porque la mujer ayude al marido para mover objetos pesados, es menos femenina”.
Omar Martínez Moor manifiesta: “Para prevenir la violencia debe de darse más comunicación entre las parejas; no debemos de faltarnos el respeto con gritos, insultos y mucho menos con golpes físicos y/o psicológicos; si hay problemas debemos de solicitar ayuda profesional para que las cosas no se deterioren más; siempre existe una forma para solucionar las diferencias y de evitar los hechos violentos que muchas veces se salen de control; todo tiene solución, menos la muerte y no se debe llegar a esos extremos; debemos de vivir tranquilos con nuestras familias y dar un buen ejemplo a los hijos; si decidimos estar al lado de una mujer es para amarla y no para herirla, lo mismo esperamos de ella”.
Mercedes Cejas Tamayo dice: “Considero que se debe de promover de una manera más amplia la cultura de la no violencia; de igual manera desde el hogar dar el ejemplo a nuestros hijos; yo tengo un varón al que siempre le recomiendo que se comporte con respeto a los demás; en mi pueblo (Chicxulub) hay muchas mujeres maltratadas por sus maridos, sobre todo psicológicamente; por temor no buscan ayuda para superar ese tipo de violencia; yo estoy totalmente en contra de eso porque el ser esposa no significa ser esclava del hombre; sería muy conveniente que en las zonas rurales impartan pláticas para evitar la violencia y que los hombres también acudan; las mujeres debemos de ser valientes y denunciar las agresiones que nos inflija nuestro marido; la comunicación entre las pareja es muy importante; mi esposo tenía un carácter muy difícil pero ahora ya es mejor su manera de ser porque yo le pedí que me respete y sea un buen ejemplo para nuestro hijo que hoy tiene 16 años y es un buen muchacho; es muy triste saber de familias en donde la violencia es cosa cotidiana y las adicciones también; el alcohol cuando se ingiere en exceso resulta muy negativo para las familias, hasta entre padres e hijos se andan golpeando y eso no está bien porque debe de imperar el respeto y se olvida cuando se llega a la borrachera; cuando los esposos comienzan a faltarse el respeto y surgen las agresiones, es mejor la separación que puede ser parcial o total según las circunstancias; ni las mujeres ni los hombres deben de ser agresivos, porque también hay mujeres que maltratan y hasta golpean a sus esposos, pero éstos se lo callan para no ser objeto de burla; considero que no hay que caer en los juegos perversos como la infidelidad porque eso ha sido causa de muchos asesinatos en contra de mujeres pero también de hombres; si ya no quieres a tu pareja sepárate de ella pero no hay que engañarla estando todavía a su lado”.
Los esposos Margarita Xool Huchim y Marcos A. Mut Dzul dicen: “Llevamos 8 años de casados y la comunicación entre nosotros ha sido muy importante para resolver nuestras diferencias y evitar momentos desagradables; tenemos 2 hijas y procuramos darles un buen ejemplo a pesar de que somos personas con una economía muy limitada, en el hogar compartimos las responsabilidades y procuramos ser felices todos los días; la violencia en ningún caso es recomendable, el amor debe de ser cosa de todos los días y cuando surge alguna mortificación debemos de recordar que precisamente por amor decidimos formar una familia; en caso de que las cosas puedan salirse de control las parejas deben de buscar ayuda profesional y así evitar que las cosas empeoren; los vicios se deben de evitar porque pueden generar violencia e inclusive llegar a lesionar a los hijos”.
Lucy Montero Mora expresa: “Yo pienso que el respeto es fundamental en una relación y sobre todo el respeto a nosotras las mujeres a las que se nos debe de valorar; en ocasiones los hijos provienen de padres golpeadores y continúan con ese mal ejemplo porque para ellos representa algo “normal”; desgraciadamente estamos en un país en donde los valores positivos ya están casi perdidos; debemos de acercarnos a la Palabra de Dios y en ella se dice que el hombre debe de tratar a la mujer como vaso frágil y a los hombres les toca obedecer ese mandato; la pareja debe de respetarse, comunicarse, ser flexible y comprensiva para que se pueda llevar una convivencia en armonía; cuando algo no vaya bien en el matrimonio hay que platicarlo para encontrar una adecuada solución; debemos de enseñar a nuestros hijos a respetar a su prójimo y evitar la violencia; hay que inculcarles los buenos valores para que el día de mañana sean buenos esposos y buenos padres”.
Juan Paat Kantún manifiesta: “La comunicación es básica para que entre las parejas las relaciones se lleven bien y no exista la violencia de ninguna de las partes; yo estoy convencido de que los hombres debemos de respetar a nuestras esposas pero también apoyarlas en las tareas del hogar; no por darle de comer a los hijos o lavar y planchar la ropa dejamos de ser hombres; esa es una idea equivocada; la educación es algo también importante, sobre todo la que se recibe en el hogar; hoy mi esposa y yo solamente tenemos un pequeño hijo pero esperamos tener a su hermanita en unos años más, esperamos ser unos padres ejemplares y verlos convertirse en personas de bien; las agresiones no se justifican, lo más recomendable es platicar las cosas y resolverlas de común acuerdo para que no existan resentimientos; los vicios hay que evitarlos porque eso genera comportamientos inapropiados; olvidémonos de las actitudes machistas y/o feministas; basemos nuestra felicidad en las cosas positivas y hagamos a un lado las negativas; con eso la violencia irá para abajo no solamente en las familias, sino de igual manera en la sociedad”.
Raúl Mayo Naal comenta: “La violencia no trae nada bueno; es preocupante enterarse que se asesinan mujeres y más que el esposo cometió el crimen; la pareja no es de nuestra propiedad, es nuestra compañera y estamos porque nos queremos y así lo convenimos los dos; debemos de vivir una vida feliz con nuestros hijos o solos, si así es el caso; el buen ejemplo para los hijos es muy importante, debemos de enseñarlos a respetar y a respetarse; diferencias existen en todos los matrimonios pero es importante el respeto, la comunicación y cuando sea necesario hasta el perdón; la infidelidad es algo que hiere mucho y debemos de evitar ser infieles porque eso ha sido causa de crímenes; cuando ya no se ama a la pareja se debe de ser honesto y hacérselo saber con tiempo; no se vale ser el último o la última en enterarse porque como ya dije, puede ser causa de una asesinato o suicidio; el alcohol y las drogas es otra cosa que debemos de evitar; a los hijos debemos de enseñarlos a respetar a sus padres para que posteriormente respeten a sus cónyuges”.
Elsy Balam Burgos dice: “En mi opinión yo creo que la comunicación es muy importante en la pareja porque si no hay comunicación pueden surgir los pensamientos equivocados; con la comunicación y el respeto de ambas partes debe de existir una sana convivencia; otra cosa que ayuda a evitar la violencia es la prudencia; un dicho reza que “Cuando uno no quiere dos no pelean”, otras cosa muy importante es evitar el alcoholismo ya sea del hombre o de la mujer, pero existen casos en que ambos tienen esa adicción y una pequeña diferencia puede resultar inclusive mortal y luego aunque venga el arrepentimiento, el daño ya está hecho y los más perjudicados son los hijos”.
Sin lugar a dudas la violencia es algo que preocupa, sobre todo la que se genera en contra de las mujeres; en Yucatán los porcentajes se están elevando y es algo que debe de preocuparnos y atenderse en todos los rincones de nuestro estado, pero sobre todo en las zonas marginadas; promover la cultura contra la violencia es algo que corresponde no solamente a las autoridades, sino también a la sociedad civil; existen agrupaciones que están haciendo lo propio, pero todavía resulta insuficiente.