Cientos de familias participaron ayer en la Bici-ruta y manifestaron su apoyo total a este programa que se lleva a cabo cada domingo y que los hoteleros pretenden hacer desaparecer.
Algunas personas comentaron que resulta absurdo que este sector de empresarios se opongan tal vez al único programa exitoso del Ayuntamiento de Mérida.
Además del acostumbrado recorrido con bicicletas, también se llevaron a cabo diferentes espectáculos, aunque vale la pena admitir que sí resultan molestos por el elevado nivel de ruido que emiten las bocinas instaladas a lo largo del derrotero.
—Yo creo que se debe hacer una revisión del programa porque es un hecho que el ruido a veces sí es molesto, pero por otro lado ves a miles de personas en bicicleta disfrutando en familia, con sus mascotas y es el tipo de programas que se deben mantener y no otros que de plano no sirven para nada, señaló la señora Dulce, vecina del Fraccionamiento Francisco de Montejo.
Como publicamos en su oportunidad, en las últimas semanas se ha desatado una polémica por el rechazo de la Asociación Mexicana de Hoteles de Yucatán a la Bici- ruta, lo que generó críticas agudas contra los directivos de esa asociación, sobre todo a través de las redes sociales por parte de diferentes colectivos que promueven el uso de la bicicleta.
Durante diciembre, y a petición de los comerciantes, la Bici-ruta se canceló en el centro de Mérida y ahora los hoteleros de plano quieren que desaparezca. Empero, los que participan activamente en este programa critican severamente la posición de estos empresarios y piden al alcalde de la ciudad que no ceda a sus chantajes y presiones.
La Bici-ruta se efectúa todos los domingos, de 8 a 12:30 horas, en un circuito que va del parque de La Ermita hasta la fuente de Prolongación Paseo de Montejo. A lo largo del derrotero se puede encontrar variedad de eventos culturales, deportivos, recreativos y de salud, y se ofrecen servicios de renta de bicicletas, abastecimiento de agua, seguridad vial, atención ciudadana, baños y servicios médicos.
Algunas personas repartieron ayer volantes en los que manifiestan su apoyo a la Bici-ruta, aunque también están conscientes que las bocinas provocan mucho ruido. Ayer, por ejemplo, un grupo de jóvenes que practicaba capoeira hacían un escandalazo con sus tambores, en perjuicio de los huéspedes del hotel Rosas y Chocolate; los propios apoyadores de la Bici-ruta señalaron que se debe respetar el reglamento que prohíbe este tipo de contaminación sonora.
En general, las familias pasaron un domingo agradable en la Bici-ruta.