El PRD hizo un llamado a todos los legisladores de Yucatán y Quintana Roo, independientemente de partidos políticos, para que se unan en un esfuerzo conjunto para evitar que se construya un Dragon Mart en la Península.
La obra, aseguran, no sólo impactará a Cancún, sino a todo su entorno, pues las plazas laborales no serán para lugareños o para los miles de yucatecos que todos los días se aventuran en busca de trabajo en el polo turístico o en la Riviera Maya, sino para 10 mil chinos migrantes.
Adicionalmente, la naturaleza de los productos afectará la economía de comerciantes de Mérida o de los municipios colindantes, como en los casos de Valladolid, Tizimín y Chemax.
Los diputados Graciela Saldaña Fraire y Trinidad Segundo Morales Vargas (PRD) hicieron la invitación durante el jueves a las representaciones legislativas de Yucatán y de Quintana Roo, así como a los plenos de sus congresos locales del Poder Legislativo.
Informaron que presentaron antes del medio día del jueves a la Comisión Permanente un punto de acuerdo para solicitar que se niegue premiso de construcción al mega proyecto comercial Dragon Mart, en Cancún.
La propuesta de los legisladores perredistas fue turnada a la Tercera Comisión para su análisis y en su caso aprobación, la cual aglutina las carteras de Hacienda y Crédito Público; Agricultura y Fomento y Comunicaciones y Obras Públicas.
De las comisiones mencionadas, por parte de Yucatán, sólo el perredista Alejandro Cuevas Mena participa de manera directa, como miembro de la Comisión de Hacienda y Crédito Público.
Por Quintana Roo, ninguno de sus diputados federales participa en las comisiones mencionadas.
Según la bancada del PRD, en documento entregado ayer, el proyecto traerá ‘consecuencias, ya que se plantea que laboren más de 10 mil trabajadores de origen chino, por lo que la mano de obra mexicana se vería reemplazada’.
Mencionan que se establecerán naves para almacenar insumos y productos de manufactura de origen chino, así como instalaciones industriales para el procesamiento final de productos y un mega centro comercial para su venta.
El proyecto también contempla la urbanización y edificación de por lo menos 722 viviendas que albergarían, en una primera etapa, a cinco mil trabajadores de nacionalidad china que trabajarían en dichas instalaciones.
En etapas posteriores, se llegarían hasta dos mil 550 inmuebles más para albergar a 10 mil ciudadanos chinos.
Los legisladores perredistas señalan que no se debe expedir el permiso de construcción para Dragón Mart, Cancún, hasta que no se cumplan fehacientemente con las disposiciones establecidas en el Programa de Ordenamiento Ecológico del municipio de Benito Juárez, Quintana Roo.
También solicitan al gobierno ‘promover un juicio de lesividad’ para revertir las irregularidades del resolutivo de autorización en materia de impacto ambiental del proyecto comercial.
Exhortan al titular del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan José Guerra Abud, a no procesar ninguna solicitud respecto al cambio de uso de suelo y evaluación de impacto ambiental relacionada con el proyecto de construcción y operación del centro comercial.
Además, que el secretario de Economía, Ildenfonso Guajardo Villarreal, ‘emprenda una investigación respecto al impacto económico de los factores de producción, así como las violaciones a la Ley del comercio exterior y de inversión extranjera que pudieran darse con la operación de Dragon Mart’.