Sepultan en Mausoleo del Policía al comandante José Antonio Koh, quien perdió la vida en un accidente vial mientras cumplía con su deber
Descansa en paz el primer inspector de la Secretaría de Seguridad Pública, José Antonio Koh Chávez, quien anteayer perdiera trágicamente la vida mientras cumplía con su deber.
Descansa en paz el primer inspector de la Secretaría de Seguridad Pública, José Antonio Koh Chávez, quien anteayer perdiera trágicamente la vida mientras cumplía con su deber.
Familiares y compañeros de trabajo, éstos últimos encabezados por el titular de la SSP, Luis Felipe Saidén Ojeda, participaron en la ceremonia luctuosa en la que se despidió con honores al infortunado policía, quien contaba con 35 años de edad y poco más de cuatro años de servicio en la Corporación.
El cuerpo del elemento policiaco había sido velado en una funeraria del centro de Mérida. La carroza que lo trasladó al panteón de Xoclán fue escoltada en todo el trayecto por una descubierta de motociclistas.
Una vez en el Mausoleo del Policía, se realizó el tradicional pase de lista y el nombre del comandante José Antonio Koh Chávez fue coreado tres veces por decenas de elementos, se detonó una fusilería de salva y un clarín entonó el toque de silencio para que luego se encendieran las sirenas de vehículos policiacos en señal de respetuosa despedida.
Los mandos montaron solemne guardia de honor, tras la cual depositaron el féretro en una fosa del Mausoleo del Policía, en el cementerio de Xoclán.
Le sobreviven su esposa, cuatro hijos cuyas edades son de 9, 10, 15 y 16 años de edad, su señora madre y tres hermanos, entre otros familiares, cuyo intenso y comprensible dolor se manifestó a lo largo de la ceremonia.
